El premio nobel de Literatura de 1998, José Saramago decía en su libro Caín: "¿Qué Dios es este que para enaltecer a Abel desprecia a Caín?" En tal sentido, en estos días el nombre más depreciado será el de Judas para enaltecer el de Jesús. Uno de los personajes más polémicos por ser el más traidor de la historia: JUDAS; NOMBRE HECHO ADJETIVO. Incluso en el diccionario de la Real Academia Española "Judas" significa hombre alevoso y traidor. 

En la polémica obra para Teatro, "THE LAST DAYS OF JUDAS ISCARIOT" (2005) del guionista, actor y director estadounidense Stephen Adly Guirgis, se plantea un juicio al más famoso traidor de la historia. En Ciudad Purgatorio, en una corte entre el Cielo y el Infierno, una apasionada abogada tratará de defender el caso más polémico de todos los tiempos. Con testigos como Poncio Pilatos, la Madre Teresa de Calcuta y el mismísimo Satanás, comenzará una de las obras más impactantes y conmovedoras que se han escrito en la ultima década y que cuestiona hasta qué punto somos capaces de perdonar y perdonarnos. Dicha obra ha llegado a presentarse en varios Teatros del mundo y en varios idiomas, y en 2011 llegó a Perú a través de la producción del Teatro La Plaza (Larcomar) dirigida por Juan Carlos Fisher.

La premisa de esta obra es mostrarnos - a través de un juicio - la otra cara de la historia de Judas, pues ¿Acaso Dios no lo perdona todo o es que verdaderamente existen cosas que ni el más misericordioso de los seres es capaz de pasar por alto? Si Dios perdona todo, ¿por qué no perdona a Judas Iscariote? 

Pocas veces reconocemos que Judas fue humano y que su madre lo enterró. En la obra, Enriqueta Iscariote le reclama a la humanidad que desprecia a su hijo año tras año: 

"El mundo me dice que Dios está en el Cielo y Judas en el Infierno. Yo le digo al mundo una Verdad: si mi hijo está en el infierno, entonces no existe el cielo, porque si mi hijo está en el infierno, ¡no existe Dios!..."

Una premisa que todos debemos reflexionar en estos días de "Semana Santa" tan importantes para la Cristiandad. Muchas veces estamos dispuestos a condenar pero no a perdonar; sin embargo, perdonar no absuelve de culpas al condenado. 

JUDAS ¿INOCENTE O CULPABLE?

Quién no haya traicionado nunca a un amigo, el que esté libre de culpa que tire la primera piedra. Claro, probablemente la víctima de tal deslealtad no era el virtuoso hijo de Dios y tampoco que tras el hecho no fuera castigado con la muerte más atroz, ¿pero el traidor es merecedor de una eterna condena infernal? 
Si se llevara a juicio a Judas por traición, ¿usted lo declararía culpable o inocente? Más bien, usted podría asumir su defensa y exponer los alegatos para defender su inocencia, ¿qué tan dispuesto está a contravenir una culpabilidad narrada acríticamente desde hace más de 2000 años?

Algunos fueron preguntados luego de ver la obra en mención:

EL EVANGELIO PROHIBIDO DE JUDAS

¿Qué pasaría si descubrimos que Jesús organizó su propia ejecución? ¿Uno de los hombres más odiados de la historia puede narrarnos otra versión de los últimos días de Cristo? ¿Qué pasaría si redescubrieran un antiguo evangelio que brinda una perspectiva radicalmente opuesta del hombre que la historia describe como el peor de los villanos?

Uno de los descubrimientos más importantes en arqueología bíblica nos ofrece una nueva versión sobre la traición a Jesús, véalo y reflexione: